4. Leh-Srinagar

Despues de los merecidos dias de descanso en Leh, nos adentramos en la segunda parte por carreteras de altura. Nuestro objetivo es Srinagar, en el corazon de la siempre conflictiva Cachemira. Para que veais lo masocas que nos hemos vuelto, aqui teneis el perfil de ruta.

El rio Indo nos acompaño a lo largo de la primera etapa, 

etapa que por poco no acabamos. Venga una birrita o que!! Eran estos dos pendejos, Ismael y Marcos, dos valencianos casi en el final de su ruta: Gandia-Kathmandu. Nos tiramos dos horas charlando, riendo, bebiendo birras y mirando de reojo el puerto que teniamos para terminar el dia. Una lastima que rodasemos en sentidos opuestos. 

Conforme ibamos llegando a Cachemira, el acoso militar era asfixiante. Controles rutinarios para identificarnos, cuarteles y nuestro peor enemigo, los comboys militares. Contamos hasta 83 bestias inmundas, pitandonos y tirandonos polvo y humo a la cara.

La carretera de Manali a Leh supera puertos mas altos y complicados que esta ruta, por lo que, ilusos de nosotros, veniamos confiados. La tonteria desaparecio rapido, en cuanto la carretera comenzo a picar para arriba, y con viento de cara. 

Atravesamos el llamado Valle de la Luna

hasta llegar a Lamayuru. Aqui descansamos un dia para disfrutar de la tranquilidad en uno de los pueblos mas bonitos de Ladakh con su monasterio dominando desde lo alto...

y los lugareños en sus quehaceres diarios, aprovechando los pocos meses que el frio da tregua, para dar de comer al ganado...

o reparar las fachadas de las casas para las futuras heladas.

Descansados, y ahora si, mentalizados, salimos temprano de Lamayuru con el molinillo puesto dispuestos a coronar el primer paso 

por una carretera serpenteante con buen asfalto hasta que a falta de 5 kms se convirtio en polvo.

Esto hizo que saboreasemos aun mas nuestro primer puerto, el Fotu La con sus 4108 m.

Como siempre, grito de alegria, foto de rigor, trago de agua, cortavientos al cuerpo y a disfrutar de la bajada.

Lugares como este inspiraron a otros viajeros a continuar su aventura...
www.ifwecandreamitwecandoit.blogspot.com

Tan mentalizados comenzamos el dia, que con el grito de "alla vamos!!!"

subimos el segundo puerto del dia, el Namika La (3815m).

Conforme avanzabamos personajes distintos nos saludaban por el camino...

esto nos indicaba que nos adentrabamos en Kargil, que aunque geograficamente pertenezca a Ladakh, se respira un ambiente totalmente musulman, con sus mezquitas y muecines llamando a la oracion.

La foto del ayatola Jomeini, lider de la revolucion islamica en Iran, y demas lideres religiosos chiies aparecen por todas partes.

Nos habian recomendado que pasasemos de largo Kargil, ya que nos ibamos a encontrar un ambiente hostil, donde el extranjero no es bien recibido. Hicimos caso omiso de las recomendaciones y nos encontramos con gente amable, curiosa, simpatica, abierta, sonriente...

La presencia militar se respira en el ambiente, incluso los niños utilizan destartalados camiones militares para ir inocentemente a la escuela.

Lo mejor cuando viajas en bici, es que en cualquier momento, debajo de cada piedra, detras de cada loma, te puedes encontrar con algo sorprendente. No nos pudimos resistir a los incesantes gritos del profesor de esta humilde escuela invitandonos a pasar a visitarla. Una vez conseguido su objetivo, nos sento en el aula acompañados de los demas profesores y de los alumnos, y comenzo la entrevista. De donde sois? Como es vuestro pais? llueve? Como son las escuelas alli? En bici? Estais locos? Despues de cada pregunta venia la traduccion a sus alumnos, alguno aburrido y casi dormido por aguantar a dos tios tan raros venidos desde tan lejos. Les dimos a los niños el consejo de que lean mucho y nos fuimos con una sonrisa de oreja a oreja.

A veces tambien toca descansar, enfriar el agua y relajar los pies en el rio, y saborear como si fuese la ultima vez una simple galleta con nutella.

Como antiguos transumantes, familias enteras venidas desde lejos, traen sus caballos, ovejas, cabras...a pastar en las fertiles llanuras. Soportando un aire incesante, bajo el polvo, colocan sus carpas dispuestos a pasar unos pocos meses al año hasta que la nieve les obligue a bajar de nuevo a tierras mas calidas.

Son gente pobre y humilde. Eso se nota por el echo de que los niños te piden a cada rato, aparecen de la nada, te asaltan o te montan emboscadas...

Tan entretenido estaba siendo el dia, que de repente, sin darnos cuenta, estabamos en la cima del tercer y ultimo gran paso, el Zoji La (3530m). Ahora solo queda disfrutar de la bajada!!

En realidad, los primeros kms de descenso no disfrutamos de nada. Envueltos en nubes de polvo, apretando bien los puños en el freno, sorteando piedras...conseguimos llegar al asfalto.

Ahora si, a disfrutar de la bajada, de los arboles y la vegetacion que hacia casi un mes que no veiamos, de los tejados preparados para la nieve...

de los rios que nos acompañaban en el descenso, de las impresionantes montañas que dejabamos atras y de una atmosfera fuerte y dura, musulmana, Cachemira!!